El azúcar no será el único castigado en las nuevas normas: el sodio (la sal), será reducido un 30 % en el contenido de las comidas escolares.
“Más del 90 % de los niños consume demasiado sodio, y las preferencias por los alimentos salados comienza temprano en la vida”, según la AHA.
Kate Wilson, directora ejecutiva de Urban School Food Alliance, subraya que los cambios “son necesarios para ayudar a los niños de EE. UU. a llevar una vida más saludable”.
No todo el mundo piensa que estos cambios son la mejor respuesta. “Los programas de comidas escolares están en un punto de colapsar”, opina Diane Pratt-Heavner, portavoz del grupo School Nutrition Association. Mientras tanto, Courtney Gaine, presidenta de la Asociación del Azúcar, expresa su preocupación por el uso de sustitutos del azúcar.
Atención. El consumo excesivo de azúcar es muy peligroso para la salud. A corto plazo, puede contribuir al acné, al aumento de peso y al cansancio. Sin embargo, a la larga, el consumo excesivo regular de azúcar puede provocar diabetes mellitus tipo 2, enfermedades cardiovasculares, aumento de la presión arterial y niveles de colesterol malo.
Además, conduce a la sobrepoblación de bacterias y hongos dañinos en el intestino, con trastornos gastrointestinales. Por lo tanto, es importante controlar la ingesta de azúcar y asegurarse de no exceder los niveles recomendados, especialmente en niños y adolescentes.
Puntos clave. Pronto habrá menos azúcar y sal en los almuerzos escolares en EE. UU. una vez que las reglas de nutrición más estrictas surtan efecto. Los alimentos ricos en azúcar serán atacados primero: para 2027 el azúcar deberá tener menos del 10 % de una comida. Por otra parte, el contenido de sal será de un 30 % menos para septiembre-noviembre de 2029.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades tienen más información sobre nutrición saludable.
Con información de: HealthDay News