Durante la mayor parte de mi vida, me he considerado sumamente saludable. Hace 30 años o más, no tenía sobrepeso, de hecho, era muy delgado. Comía tres veces al día (desayuno, almuerzo y cena), pero mis hábitos alimenticios no eran los mejores.
Mi dieta era, como la mayoría de las dietas de Occidente, mucha comida procesada y rápida, y refrescos azucarados. No me daba cuenta de los conservantes, aceites hidrogenados y sustancias tóxicas que consumía. Además, debía sumar otro gravísimo daño para el cuerpo (aún vigente): los contaminantes ambientales como gases de escape, humos, químicos varios y pesticidas, que abundan en las grandes urbes del planeta.
No tenemos en cuenta que rociamos nuestros hogares con químicos para matar insectos. Caminamos sobre la hierba que fue rociada con más químicos. Y no podemos salir sin estar expuestos a gases de escape de automóviles, aviones, etc., etc.
Para colmo de males, nuestro suministro de alimentos es deficiente. No comemos como nuestros abuelos y bisabuelos. Su comida era más rica en nutrientes. Hoy, hemos agotado los recursos naturales. Estamos expuestos a químicos utilizados para aumentar la productividad de los cultivos. ¿Qué significa? ¡Vivimos en un entorno altamente tóxico!
Hay varios tipos de métodos de desintoxicación para deshacerse de su sobrecarga tóxica. La limpieza del colon es uno de ellos. La mayoría tiene dificultades con su colon, como el estreñimiento. La limpieza del colon involucra alimentos ricos en fibra. O tomando suplementos de fibra. Una dieta que incluye verduras y frutas como frambuesas o arándanos es una gran fuente de fibra. También debe consumir mucho, mucho líquido. Hidrata, nutre su cuerpo y elimina las toxinas y la materia fecal de su sistema.
La dieta es vital. Siempre que sea posible, comer orgánico. Tenemos suficientes químicos y alimentos procesados con los que lidiar. Ingiera todos los alimentos naturales, pero naturales de verdad. En lugar de esa barra de caramelo para energía rápida, coma fruta.
El ayuno es una terapia válida. Cuando come, el cuerpo pasa muchas horas procesando los alimentos a través de la digestión. Cuando deja de comer durante un período y bebe como cuatro o cinco botellas diarias de agua, el cuerpo remueve las toxinas. El ayuno puede ser de uno a tres días o hasta 10 días si se hace correctamente y bajo el cuidado de un médico o nutricionista.
Los baños de pies. Es una práctica que se promociona en algunos círculos como un método para expulsar las toxinas. Estos baños sumergen los pies en agua tibia mezclada con sales u otros ingredientes. Afirman que a través de los poros de los pies, se desechan las toxinas del cuerpo durante el proceso. Importante. En este caso, la sensación de bienestar estaría más relacionada con el efecto placebo. Así lo sugieren algunas investigaciones.
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