“Después de años de práctica diaria manejando la interferencia entre dos idiomas, los bilingües se convierten en expertos en seleccionar información relevante e ignorar la información que puede distraer de una tarea. En este caso, los bilingües mostraron mayor conectividad entre las áreas de procesamiento visual ubicadas en la parte posterior del cerebro. Esta área está especializada en la detección de las características visuales de los objetos y por lo tanto se especializa en la tarea utilizada en este estudio. Estos datos indican que el cerebro bilingüe es más eficiente y económico, ya que recluta menos regiones y sólo regiones especializadas”, explicó la doctora Ansaldo.
Los bilingües tienen una doble ventaja a medida que envejecen
Los bilingües, por lo tanto, tienen dos beneficios cognitivos. Primero, tener conexiones funcionales más centralizadas y especializadas ahorra recursos en comparación con las múltiples y más diversas áreas cerebrales asignadas por monolingües para llevar a cabo la misma tarea. En segundo lugar, los bilingües logran el mismo resultado al no utilizar las regiones frontales del cerebro, que son vulnerables al envejecimiento. Esto puede explicar por qué los cerebros de los bilingües están mejor equipados para evitar los signos del envejecimiento cognitivo o la demencia.
“Hemos observado que el bilingüismo tiene un impacto concreto en la función cerebral y que esto puede tener un impacto positivo en el envejecimiento cognitivo. Ahora tenemos que estudiar cómo esta función se traduce en la vida cotidiana, por ejemplo, al concentrarse en una fuente de información en lugar de otra, algo que tenemos que hacer todos los días. Y todavía tenemos que descubrir todos los beneficios del bilingüismo”, concluyó la doctora Ansaldo.