Muchas veces nos sentimos enfermos, cansados o tenemos dolores que no podemos explicar. Para la mayoría de las enfermedades hay signos de advertencia, algunos pueden venir en forma de dolores sutiles u olores, inflamación o formaciones extrañas en nuestros cuerpos. Lo importante es escuchar a su cuerpo, porque está tratando de enviarle un mensaje, aunque no siempre sea claro.
Está ganando o perder peso
Las personas con sobrepeso tienden a clasificarse en dos categorías: (1) “manzanas”, que tienen su peso extra alrededor de la cintura y el vientre, y (2) “peras”, que tienen su peso extra alrededor de las caderas y los muslos. Mientras que el sobrepeso es uno de los susurros del cuerpo de mala salud, las personas en forma de manzana están en mayor riesgo de sufrir enfermedades del corazón que las personas en forma de pera, porque tienen esa grasa alrededor de los órganos. Perder peso demasiado rápido sin hacer dieta o hacer ejercicio también es un gran problema. Esto podría significar que tiene diabetes, un problema de tiroides o, incluso, cáncer.
Mal aliento
El Dr. Mercola define los problemas digestivos como “poco conocidos pero principales causantes del mal aliento” y afirma que un olor a pescado sugiere problemas de riñón, mientras que un olor a fruta puede indicar diabetes no controlada. Causado por un desequilibrio de bacterias buenas y malas en el intestino, el olor puede incluso empeorar después de comer algo azucarado porque la bacteria se está alimentando del azúcar. Los trastornos del sistema digestivo, como el reflujo (enfermedad del reflujo gastroesofágico) son también causantes de mal aliento. Tome una dosis alta de prebióticos y alimentos fermentados para ayudar a su cuerpo a digerir mejor la comida y alimentar a las buenas bacterias. Estos alimentos también alteran la flora en la boca que conduce a un mejor aliento rápidamente.
Picazón en la piel
Podrían ser solo alergias o algún otro trastorno benigno de la piel, pero el exceso de picazón también puede ser la única manera que tiene su cuerpo de decirle que sufriendo una enfermedad hepática. Entre las afecciones cutáneas que conducen a erupciones podrían incluirse las picaduras de insectos, una deficiencia de hierro, trastornos nerviosos, reacciones alérgicas e incluso reacciones a ciertos medicamentos. Las mujeres embarazadas también experimentan picores en la piel, que puede ser un signo de deshidratación o que la piel comienza a expandirse a medida que crecen, por lo que es tan importante beber mucha agua e hidratarse.