Mi amigo José es un experto en nutrición, porque sabe leer “al pie de la letra” las etiquetas de los alimentos. Por esta razón, cuando salimos a comer, siempre recomienda qué platos son más saludables.
Un día fuimos a un restaurante y yo estaba indeciso sobre qué pedir. José me recomendó la ensalada de pollo, con una cantidad adecuada de proteínas y verduras. Le pregunté cómo sabía todo esto y él me explicó que había estudiado los diferentes tipos de alimentos más saludables para el cuerpo.
Después de nuestra comida, fuimos al supermercado y José me mostró algunas etiquetas que debía evitar. Me enseñó la información nutricional y cómo identificar los alimentos totalmente naturales, sin ingredientes artificiales. Desde entonces, presto más atención a mis compras de alimentos, aunque pierda algo de tiempo.
Entre otros nombres, las etiquetas muestran las grasas, sodio, fibra y colesterol “por ración”. Sin embargo, un consumidor típico se preguntará qué significan esas cifras y cómo afectarán a su dieta.
Para tener una visión más completa:
1 – Ingredientes. El listado está ordenado desde los ingredientes principales con más cantidad hasta la más pequeña. 2 – Información nutricional. Detalla los valores nutricionales del producto. Las calorías, las grasas, los carbohidratos, las proteínas, las vitaminas y los minerales. También incluye información sobre el tamaño de la porción y el número de porciones por envase.
3 – Información alergénica. Si el producto contiene ingredientes que desencadenan alergias, debe indicarse en la etiqueta. Ejemplos: leche, huevo, maní, trigo, soja, mariscos o frutos secos. 4 – Fecha de vencimiento. Indica la fecha límite hasta la cual se garantiza la calidad y seguridad del producto. Aparece como “fecha de caducidad” o “consumir preferentemente antes de…”. Hay alimentos sin obligación de llevar una etiqueta de caducidad, entre ellos: frutas, hortalizas y patatas frescas, vinos y vinagres, bebidas alcohólicas con una graduación superior al 10 % y sal de cocina.
5 – Calorías. Es la cantidad de energía que obtendrá al consumir una porción del alimento. Si sigue una dieta específica, use este valor como referencia para controlar la ingesta calórica. 6 – Grasas. Algunos productos contienen grasas saturadas o trans, que son consideradas menos saludables. Limite su consumo y opte por alimentos con grasas insaturadas. Las mono-insaturadas y poli-insaturadas son más saludables.