En general, un cuarto de los niños estadounidenses hispanos entre los seis y 11 años de edad son obesos.
“Por eso es que también estamos tratando de corregir nusetra forma de comer”, dijo Ana, quien vio a sus padres batallar con diabetes. Con el tiempo, su madre perdió la vista y la capacidad para caminar.
En la clínica del Phoenix Children’s Hospital donde recibió tratamiento Maryflor, la dietista Candace Johnson le enseñó a Maryflor y a su mamá cómo comer porciones adecuadas, y cómo preparar sus platillos favoritos de forma distinta. Sugirió, por ejemplo, sustituir el arroz integral por el arroz blanco, comer más pollo y menos carne de res, hornear más en lugar de freír y comer tortillas de maíz en lugar de las de trigo.
Ver a Maryflor “tomar las riendas y simplemente decir, ‘voy a tomar control de mi salud y lo voy a hacer y me voy a divertir’, me inspiró”, dijo Johnson.

Maryflor habla con emoción sobre sus confecciones de licuados. Sus sándwiches de pavo y jamón están atiborrados de espinacas, tomates y algas. Prepara su propia mezcla de frutos secos, y usa el internet para buscar fotos de comidas coloridas que la familia puede preparar.
El endocrinólogo de la clínica, Micah L. Olson, M.D., dijo que muchas de las familias que llegan a la clínica no tienen los recursos que necesitan para hacer cambios, o quizás no estén motivados para cumplir con los cambios que deben hacer.
“El grado de motivación de los padres es uno de los factores principales que determinan el éxito de los niños”, dijo. “No podemos estar más orgullosos de Maryflor y sus papás”.
Hoy, Maryflor cuenta los días que faltan para su quinceañera que celebrará la primavera que viene. La jovencita, cuya ambición es ser diseñadora de modas, quiere lucir un vestido morado y plateado.
Maryflor ha perdido aproximadamente 65 libras, y su mamá ha perdido 15 libras. Pero la jovencita quiere que los niños que tienen sobrepeso sepan que “incluso perder cinco libras puede [ayudarte] a sentir mucho mejor”.
La estrategia de la familia Peña de “todos para uno y uno para todos” ha sido la receta para el éxito de Maryflor.
“Veo el gran esfuerzo que ha hecho”, dijo Ana. “Me siento muy orgullosa de ella”.
Fotos cortesía de la familia Peña