A menos del 5 por ciento de los adultos jóvenes con albuminuria les habían comunicado que tenían una enfermedad renal, según los hallazgos publicados en línea el 25 de mayo en la revista PLoS One.
“Claramente, los profesionales clínicos y las autoridades de salud pública deben hacer más para identificar y tratar a las personas jóvenes en riesgo de sufrir una enfermedad renal progresiva temprana, a fin de que puedan realizar los cambios conductuales para evitar que se desarrolle [una enfermedad renal]”, dijo Melamed en un comunicado de prensa del Albert Einstein.
Aproximadamente un tercio de los estadounidenses están en riesgo de enfermedad renal crónica durante su vida, normalmente cuando son mayores.
“Dado que las opciones de tratamiento de [la enfermedad renal crónica] son limitadas, la prevención es el mejor método para los que están en riesgo”, añadió Melamed. “Si los adultos jóvenes llevan un estilo de vida más saludable, eso será muy beneficioso para promover la salud de los riñones más adelante en la vida”.
Las investigaciones previas han sugerido que la obesidad abdominal podría dañar la función renal antes que la hipertensión y la diabetes, las cuales se asocian con la obesidad. La obesidad abdominal se define como tener una circunferencia de la cintura de 35 pulgadas (89 cm) o más para las mujeres no embarazadas y de 40 pulgadas (101.5 cm) o más para los hombres, según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de EE. UU.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
© Derechos de autor 2016, HealthDay