importantes en el estilo de vida que debe realizar en casa. Para tener éxito, esos cambios deben centrarse en la familia, y no solo dirigirse al niño.
Los pasos clave respecto a la dieta son reducir los alimentos malsanos y ricos en calorías; las bebidas endulzadas con azúcar; los alimentos con azúcares añadidos y con jarabe de maíz de alta fructosa; los alimentos procesados ricos en grasa y sodio; y, en los niños de más de dos años, los alimentos ricos en grasa saturada.
Practique (y enseñe a los niños la forma de practicar) el control de las porciones. Use paquetes de una sola porción para los refrigerios aceptables, planifica comidas regulares, y ayúdeles a evitar el “picoteo” constante durante el día, sobre todo después de la escuela y la cena.
Asegúrese de que las calorías provengan del consumo recomendado de fibra dietética, proteína, frutas y verduras, y no de comida basura.
Anime al ejercicio diario. Los niños deben comenzar con 20 minutos de actividad física entre moderada y vigorosa al día, y aumentar de forma gradual hasta una hora al día. Unas sesiones cortas de ejercicio son