controlabilidad del peso, el prejuicio contra la gordura y el respaldo para las políticas que discriminan basándose en el peso.
Casi un 40 por ciento de los adultos de Estados Unidos son obesos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. La obesidad se define como una proporción entre la estatura y el peso, conocida como índice de masa corporal (IMC), de 30 o más, y aumenta de forma marcada los riesgos de enfermedad cardiaca, accidente cerebrovascular y ciertos tipos de cáncer, señalan los CDC.
Aunque la deshumanización fue más pronunciada entre los participantes más delgados, todos los grupos calificaron a un “estadounidense obeso” como menos evolucionado y humano que los “estadounidenses”, excepto los participantes que tenían una obesidad extrema (un IMC de a partir de 35).
Además, la deshumanización de los obesos fue evidente en los participantes de los tres países.
“En general, sabemos que las personas tienden a considerar a otros grupos de los que no forman parte como inferiores a ellas”, apuntó Kersbergen. “No hemos podido