Se mira en el espejo y no logra entender de donde salió esta barriga. Va al gimnasio y se entrena a fondo, pero no hay manera de que desaparezca. Averigüe cómo llegó y cómo deshacerse de ella.
Tipos de grasa
Hay dos tipos de grasa: subcutánea y visceral.
La subcutánea, que significa “por debajo de la piel”, es la grasa que podemos ver a simple vista y pellizcar. Es la que intentamos eliminar yendo al gimnasio. Aunque la flacidez puede ser desagradable, esta es la menor de sus preocupaciones.
La visceral, pertenece a los órganos blandos del abdomen. Es la grasa almacenada en el abdomen, alrededor de los intestinos, los riñones, el páncreas y el hígado. Esta es la grasa que tiende a hacer que nuestros estómagos sobresalgan como la clásica “barriga cervecera”.
A medida que los hombres envejecen, empiezan a salir este tipo de barrigas. Después de los 40 años, la reducción natural de la testosterona significa que el exceso de calorías se almacena en forma de grasa visceral. Naturalmente, envejecer nos hace perder masa muscular. El músculo ayuda a mantener el metabolismo continuamente en marcha y cuando perdemos músculo el metabolismo se ralentiza y es mucho más fácil ganar grasa, que va directa a la zona abdominal de los hombres.
Hábitos dietéticos
Comer demasiado de cualquier alimento puede causar un aumento de peso. Ciertos alimentos son más propensos a conducir a la acumulación de grasa del vientre que otros, como los granos refinados. La soda, por ejemplo, es más probable que contribuya a un vientre más grande y mucho más duro. Las bebidas azucaradas como la soda, el ponche de frutas y las bebidas energéticas contienen las calorías que contribuyen al aumento de peso. Evite las bebidas dulces: el agua o los tés naturales son alternativas mucho mejores.
De acuerdo con el Journal of Clinical Nutrition, los investigadores descubrieron que el aumento de la ingesta de granos refinados estaba relacionado con una mayor cantidad de grasa en la zona del vientre, mientras que el aumento de la ingesta de grano entero, no. Evite comer granos refinados y consuma más arroz integral, quinoa, pan de trigo integral y una gran cantidad de verduras fibrosas.
Las grasas saturadas son también uno de los principales culpables de la grasa del vientre. Ciertos tipos de cortes de carne y productos hechos a base de leche entera contienen este tipo de grasa. Un exceso de grasas saturadas también puede hacer que la grasa del vientre aparezca más rápido. En su lugar, pásese a las grasas poliinsaturadas como las de las nueces, salmón y semillas. Opte también por carnes más magras, como la pechuga de pollo, filete de flanco y pescado blanco, en vez de costillas, la pechuga de vacuno y los muslos de pollo.