tienen un gen CMAH operativo, y en ratones genéticamente modificados para tener el gen inactivo.
El resultado: los ratones sin un CMAH activo presentaron casi del doble de acumulación de grasa en los vasos sanguíneos.
Esa actividad malsana aumentó incluso más entre los ratones sin un gen CMAH activo a quienes se alimentó con carne roja, que contiene la Neu5Gc de forma natural.
Según los investigadores, ese hallazgo podría explicar el vínculo entre las dietas ricas en carne roja y el aumento en el riesgo de enfermedad cardiaca en los humanos. Creen que el contacto con la Neu5Gc podría provocar una reacción inmunitaria en el cuerpo humano, que a su vez conduce a un estado de inflamación crónica en los vasos sanguíneos.
“Cuando el compuesto que falta en nuestros cuerpos se ingiere en la forma de carne roja, dado que otros animales todavía pueden producirlo, parece crear una