los hallazgos son interesantes.
“Ahora parece haber un vínculo plausible entre la genética, la dieta, la inflamación y la aterosclerosis [el endurecimiento de las arterias]”, indicó el Dr. James Lafferty, que no participó en el estudio. “Esto podría ser de verdad el eslabón perdido”.
El equipo de la UCSD anotó que no se sabe que ninguna otra especie sufra ataques cardiacos debido a la aterosclerosis. Ni siquiera los chimpancés en cautiverio, que al igual que los humanos con frecuencia son inactivos y acumulan colesterol en la sangre y pueden tener hipertensión, sufren ataques cardiacos debido a las arterias taponadas con grasa.
Entonces ¿por qué los humanos sí? Para averiguarlo, investigadores dirigidos por una profesora de patología, la Dra. Nissi Varki, y un profesor de medicina, el Dr. Ajit Barki, observaron a un gen conocido como CMAH.
La función del gen es producir una molécula del ácido siálico llamada Neu5Gc, que en otros