disminuido, apuntó Donna Arnett, decana del Colegio de Salud Pública de la Universidad de Kentucky, en Lexington.
“Si se observa la actividad física desde el gasto energético ocupacional, se ha reducido de forma dramática en las últimas tres o cuatro décadas”, dijo. “Nuestros trabajos se automatizan más. Hay mucha menos actividad física en el trabajo”.
La proliferación de las pantallas en el trabajo y en casa no ha ayudado, añadió.
“Es probable que la automatización de nuestras vidas, en casa y en el trabajo, también esté relacionada con el aumento en el tiempo de uso de pantallas. Las personas pasan más tiempo viendo sus teléfonos y trabajando en las computadoras, incluso después de salir de trabajar”, comentó Arnett.
¿Por qué las Directrices de Actividad Física no han