No siempre es posible reducir el colesterol solo mediante la dieta; a veces no hay forma de vencer al ADN, y el uso de medicamentos es obligatorio.
Pero ciertos alimentos pueden formar parte de un plan para mejorar los niveles, tanto para reducir el colesterol de lipoproteína de baja densidad (LDL), que es el malo, como para aumentar el colesterol de lipoproteína de alta densidad (HDL), que es el bueno.
En primer lugar, elija alimentos con fibra soluble. Imagínese que este tipo de fibra es un imán, que atrae al colesterol y lo saca del cuerpo. La avena, el salvado de avena, la cebada, los frijoles, la berenjena y el quimbombó (también conocido como angu y ocra) son buenas fuentes. Cuando se usan en recetas, esos alimentos tienden a absorber los sabores de otros ingredientes, así que sea aventurero al planificar las recetas, y generoso con las hierbas y las especias.
Las manzanas, uvas, fresas y cítricos son buenas opciones, debido a