capacidad reducida de sudar, y por tanto de enfriar sus cuerpos. También quizá estén tomando medicamentos para tratar la presión arterial, lo que puede reducir su capacidad de sudar, apuntó Glatter.
El golpe de calor es una emergencia médica que requiere de un tratamiento inmediato. En esos casos, llame al 911.
Los medicamentos como el acetaminofén (Tylenol) y el ibuprofeno (Motrin) no reducen las temperaturas corporales centrales altas, y podrían incluso resultar dañinos. Los pacientes necesitan enfriarse rápidamente para reducir las temperaturas centrales altas.
Junto con los antihipertensivos, los antihistamínicos, los ansiolíticos y los antidepresivos también podrían aumentar el riesgo de golpe de calor, al reducir la capacidad de una persona de sudar, anotó Glatter.
“La hipertensión, la enfermedad de la arteria coronaria y la enfermedad renal, comunes en la población de adultos mayores, elevan el riesgo de desarrollar un