tratamiento con el desinfectante, mostraron los hallazgos.
“Debido a esta resistencia, quizá sea prudente replantear la cantidad de biocida que usamos ahora, y garantizar que el control de las infecciones se estandarice. Este trabajo se puede aplicar a los hospitales de todo el mundo, y debería ayudar a orientar a las directrices futuras sobre el control de las infecciones y los biocidas”, concluyó Joshi.
Más información
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. tienen más información sobre la C. difficile.