echarse hacia delante y sacar la mano para que un perro la huela es lo correcto, pero en realidad el perro puede percibirlo como algo amenazante”.
Herron sugirió que “en vez de eso, pregunte al dueño del perro si puede acariciarlo, póngase de lado, agáchese de rodillas, dé una palmadita en su propia pierna y deje que el perro venga a usted”.
Los hallazgos del estudio se publicaron en una edición reciente de la revista International Journal of Pediatric Otorhinolaryngology.
Más información
La Asociación Americana de Medicina Veterinaria (American Veterinary Medical Association) ofrece más información sobre cómo prevenir las mordeduras de perro.