mitad (un 48 por ciento) contenían ingredientes que los estudios han encontrado que podrían tener impactos negativos.
“En general, no estoy en contra de los complementos”, anotó la autora del estudio, la Dra. Mary Samplaski. “Tengo muchos pacientes que los toman. Pero la FDA [Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU.] señalan con mucha claridad que no se debe afirmar que esos productos tratan afecciones médicas. Y un 90 por ciento de estos complementos de testosterona hacen dichas afirmaciones. Sentía mucha curiosidad sobre qué respaldo científico tenían esas afirmaciones”.
Samplaski dijo que “lo que encontramos es que en la gran mayoría de los casos no había evidencias para mostrar que ninguno de esos ingredientes en los complementos de testosterona fuera efectivo de alguna forma”.
El resultado, dijo, es que “las personas deben comprender que solo porque haya un sitio web atractivo con una fotografía de Arnold Schwarzenegger no significa que es el resultado que deberían esperar”.
Samplaski es directora de infertilidad masculina en el departamento de urología de la