A lo largo de un año, las reducciones más significativas en los niveles de HbA1c se vieron en los pacientes cuyos niveles eran más altos cuando el estudio comenzó (de un 9 por ciento o más, una señal de azúcar alto en la sangre y un riesgo mayor de complicaciones de la diabetes).
“En el subgrupo de pacientes con diabetes sin controlar, vimos una reducción en los niveles de HbA1c que se esperaría cuando un paciente inicia un nuevo fármaco para la diabetes”, anotó Kerfoot.
Aunque sus niveles de azúcar en la sangre seguían por encima del rango objetivo, los pacientes habían dado un paso firme en la dirección correcta que resultó en una mejora duradera y significativa, añadió. Kerfoot también pertenece a la facultad del Sistema de Atención de la Salud de VA de Boston.
El Dr. Paul Conlin, endocrinólogo y autor principal de estudio, dijo que los veteranos no solo aprendieron información de salud útil sino que también disfrutaron de la experiencia.
“Más o menos un 89 por ciento de los participantes solicitaron participar en programas futuros que usen el juego. Este método también podría ser una forma efectiva y expansible de mejorar los resultados de salud en otras enfermedades crónicas”, planteó en el comunicado de prensa.
Conlin es vicepresidente de medicina en el Hospital Brigham and Women’s, y jefe del servicio médico en el Sistema de Atención de la Salud de VA de Boston.
El estudio aparece en línea el 8 de agosto en la revista Diabetes Care.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com