Las revisiones rutinarias pueden salvar vidas. Esta es la razón por la que se recomienda que visite a su médico de cabecera, se haga revisiones oculares y limpieza de dientes al menos una vez al año. Estas revisiones rutinarias pueden dar a su médico una visión interior de su salud e incluso ayudar a diagnosticar ciertas cosas que ni siquiera sabe que puede tener. Para un dentista, su boca puede decir mucho acerca de sus hábitos de higiene, los tipos de alimentos que come, la placa, el sarro… incluso la gingivitis podría conducir a diagnosticar problemas más grandes.
Diabetes
La enfermedad severa de las encías o la periodontitis puede ser un signo temprano de la diabetes tipo 2. Un estudio reciente encontró que el sobrepeso de adultos de mediana edad con enfermedad severa de las encías tenían un mayor riesgo de diabetes. Uno de cada cinco de estos pacientes tenía diabetes tipo 2 no diagnosticada. Esto se debe a que las personas con diabetes son más propensas a contraer infecciones.
Embarazo
Si usted nunca ha tenido un problema con sus encías, pero de repente está notando que están inflamadas y sangran, esto puede ser una señal de que está embarazada. La gingivitis es muy común durante el embarazo debido a los cambios hormonales y el aumento del flujo sanguíneo a las encías. Además, sus hormonas pueden prevenir la capacidad de su cuerpo para combatir las bacterias, que también pueden causar la acumulación de placa.
Malnutrición
Su dentista puede saber si usted tiene un trastorno alimenticio o si tiene una nutrición deficiente simplemente mirando sus dientes. Cuando le faltan ciertas vitaminas, su boca tiene una menor resistencia a la biopelícula microbiana que proviene de la placa y una menor capacidad para curar el tejido inflamado de las encías. Una deficiencia de vitaminas y trastornos alimentarios como la bulimia también pueden hacer que el esmalte de los dientes se debilite.
Enfermedades del corazón
La diabetes y las enfermedades del corazón siempre se han relacionado. De hecho, muchos pacientes que tienen una de estas enfermedades están en riesgo de sufrir la otra. El mismo vínculo existe entre la enfermedad de las encías, la acumulación de placa y la enfermedad cardiovascular. Un estudio de la American Stroke Association confirma que incluso los adultos con enfermedad leve de encías son dos veces más propensos a tener un accidente cerebrovascular isquémico que aquellos sin problemas de salud oral.
Osteoporosis
La enfermedad severa de las encías puede ser un vínculo con la osteoporosis, especialmente cuando las personas comienzan a perder sus dientes. Esto sucede porque la osteoporosis disminuye la densidad del hueso que sostiene los dientes, comprometiendo el cimiento desde donde nacen los dientes.
Hay muchas otras enfermedades que su dentista puede ver, por lo que es importante que se haga una revisión dental cada seis meses y se haga una limpieza, o sino al menos una vez al año. Si nota que algo va mal o tiene alguna molestia, consúltelo con su dentista o su médico de cabecera, pueden ayudarle a tener un diagnóstico claro y proporcionarle tratamiento tan pronto como sea posible.