Se supone que los parques infantiles son divertidos. Pero las barras oxidadas, la basura y el equipamiento mal mantenido pueden hacer que esas zonas aparentemente aptas para niños sean en realidad peligrosas, según un grupo de médicos de medicina de emergencias.
Cada año, más de 200,000 niños son tratados en el departamento de emergencias por lesiones relacionadas con los parques infantiles, y ha habido un aumento dramático en años recientes, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Y unos 20,000 de esos niños son tratados por una lesión cerebral traumática, incluyendo la conmoción, cada año. Los niños también pueden fracturarse un hueso, o incluso desarrolla una hemorragia interna debido a los accidentes que ocurren en un parque infantil.