Mi amigo Pedro siempre ha sido un poco excéntrico. Está convencido de que la Luna llena tiene poderes curativos, y pasa horas mirándola y disfrutando de su luz blanca y brillante. Sostiene que gracias a la Luna, desaparecen todas sus molestias, como si una misteriosa energía invadiese su cuerpo.
Si él cree que los poderes curativos de la Luna lo hacen feliz, ¿quién soy yo para discutirlo? Y quién sabe, tal vez hay algo de verdad en sus pensamientos sobrenaturales.
El folclore de todo el mundo proclama a los cuatro vientos que la Luna afecta nuestra vida diaria, el comportamiento y la salud, desde el cerebro a los pies. Algunos estudios sugieren que la Luna sí tiene impacto en ciertos aspectos, como el parto.
Algunas personas sostienen que la Luna llena está asociada con un aumento en las visitas a salas de emergencia, al insomnio o cambios en el estado de ánimo. Hasta ahora, los estudios sobre posibles correlaciones entre la Luna llena y la salud o el comportamiento humano, tienen resultados mixtos.
¿Hay alguna evidencia de que la luz de la Luna nos mantiene despiertos? Investigadores estudiaron a quienes viven en entornos rurales y sin electricidad, y descubrieron que para ellos el sueño comienza más tarde en noches de Luna. Y aunque la luz no es tan potente como la solar directa, la exposición a la Luna hace que las personas se sientan más despiertas.
Según la ciencia, la Luna llena por sí sola no es lo suficientemente resplandeciente como para impactar los patrones de sueño y vigilia, que están más influenciados por la luz solar.
Pero, en ciertos contextos, como en áreas rurales con poca o sin iluminación artificial, la luz de la Luna llena influye en las actividades agricultores o cazadores, cambiando los patrones de sueños y vigilia.
La actividad humana a lo largo de la historia ha estado orientada por la luz del Sol y el ciclo natural de día y noche. Los seres humanos han evolucionado como criaturas diurnas, lo que significa que somos más activos con luz solar. Si bien la luminosidad de la Luna proporciona visibilidad nocturna, no es tan brillante como para permitir actividades complejas o una vida activa.
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¿Es perjudicial para la mente? Mucha gente está convencida de que la Luna llena altera su estado de ánimo. Las investigaciones no respaldan esta afirmación. Un estudio a 18.000 personas que buscaron atención médica por dificultades mentales en EE. UU., en los últimos dos meses de 2022, no halló conexión con las fases de la Luna. Tal vez la Luna transforma el estado de ánimo de maneras más sutiles, como cambios de humor.
¿Inquieta más a las mujeres? Hay quienes creen que la Luna sí interviene en el ciclo menstrual. Según parece, los ciclos menstruales están sincronizados con la atracción gravitacional lunar. La sincronización es más fuerte cuando la Luna está más cerca de la Tierra.
¿Las fases lunares influyen en el parto? Un estudio a 40 millones de mujeres embarazadas, concluyó que los nacimientos aumentaron durante la Luna llena. Esto, sí está en concordancia con las creencias populares. Hace miles de años, nuestros antepasados veían a la Luna llena como un fenómeno místico y sagrado, asociado con la fertilidad y el ciclo de la vida.
Las investigaciones demuestran que la actividad de las ambulancias es mayor por accidentes de tráfico durante la Luna llena. Una razón: la Luna distrae a los conductores.
También hay estadísticas comprobadas de una observación científica sobre la delincuencia y las fases lunares: las tasas de criminalidad al aire libre son más altas durante la Luna llena.
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🟧 ✳️ MÁS DATOS
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La leyenda popular enfatiza que la Luna dirige nuestro comportamiento. Es posible que la ciencia aún no detectó lo que algunas sociedades han creído durante mucho tiempo. Sin más investigación, los científicos no descartan por completo la idea de que la Luna llena actúa en nuestra salud y comportamiento.
Por otra parte, las mareas, influenciadas por la gravedad de la Luna, acentúan dolencias de quienes viven cerca de la costa y del agua.
¿Salen más locos o lunáticos a la calle? No hay evidencia científica sólida que respalde la idea de que la gente se vuelve “más loca” durante la luminosidad de la Luna llena. La creencia de que la Luna perturba el comportamiento humano se conoce como “lunaticismo”, un término que ya no se utiliza en la terminología médica actual. Al referirse a trastornos mentales como la psicosis o la esquizofrenia, las causas son diversas y complejas. La idea de que la Luna llena nos transforma en “lunáticos” y nos transporta a procederes inusuales, es un mito. Ah, y tampoco nos convierte en hombres-lobo o zombis.
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