¿Necesita otro motivo para tomarse unas vacaciones? Quizás ciertamente serían buenas para su mente y corazón.
Durante años las investigaciones han sugerido que los días libres, y el salirse de la rutina estresante de todos los días, generan más que fotografías y recuerdos.
Uno de los estudios más citados, el Multiple Risk Factor Intervention Trial, publicado en el 2000, dio seguimiento durante nueve años a hombres de mediana edad con la conclusión de que quienes tomaron vacaciones anuales más veces, tuvieron menos probabilidad de morir debido a factores cardiovasculares incluidos los ataques al corazón. Otras encuestas y estudios han vinculado las vacaciones con tener menos depresión, niveles menores de estrés y un mejor bienestar en general.
El Dr. Anand Rohatgi, médico en cardiología preventiva y profesor asociado de medicina en UT Southwestern Medical Center en Dallas, dijo que se necesitan más estudios sobre el tema, pero que la idea tiene sentido.
“La mayoría de estos estudios son de observación, aunque sea típico que las personas que toman menos vacaciones sienten más estrés y tienen más problemas de salud”, agregó. “Si no se toma tiempo para recuperarse y restaurarse, el desempeño no es tan bueno y aumenta la tendencia de sufrir lesiones, inflamación y enfermedades”.
También mencionó que uno de los obstáculos para obtener conclusiones definitivas es lo difícil que resulta separar el tema de las vacaciones de los demás factores que afectan la salud.
“Las personas que optan por salir de vacaciones, o que pueden tener más tiempo de vacaciones, podrían ser muy distintas a las personas que no pueden hacerlo”, dijo Rohatgi. “Podría relacionarse con el puesto que se ocupa en el trabajo o la situación económica de la persona, sin que se trate únicamente de las vacaciones en sí”.
No obstante, el cardiólogo dijo que les aconseja a sus pacientes, sobre todo a los que tienen problemas del corazón, que reduzcan su estrés con tiempo de descanso siendo parte de la estrategia.
“El estrés puede elevar la presión sanguínea, acelerar el pulso, ocasionar arritmia o empeorar cualquiera de estas condiciones, además de hacer que sean más difíciles de controlar”, agregó. “Existen implicaciones cardiovasculares claras en cuanto a mantener el equilibrio y disminuir el estrés. Es necesario hacerlo a cierto nivel cotidianamente, pero las vacaciones son una manera placentera de desconectarse y desentenderse de las cosas”.
La clave es desconectarse totalmente.
“Necesita aprovechar esas vacaciones debidamente”, dijo Rohatgi. “Si bien toma tiempo libre, podría seguir pegado a la pantalla del teléfono con correo electrónico y llamadas constantes. Estar en otro lugar pero seguir checando los mensajes todo el tiempo podría restarle al beneficio que piensa que está obteniendo”.
Lo que haga, y lo que coma, pueden marcar la diferencia. Un sabático con mucho aire fresco y caminatas vigorosas podría tener un efecto más saludable comparado con un crucero con barra ilimitada de alimentos y bebidas, o un viaje en carretera en el que vuelve a surtir los refrescos y las papitas en cada parada.
“A veces tenemos la tendencia de viajar y pensar que hay que aprovechar todo al máximo”, dijo Andrea D’Ambrosio, dietista y asesora de nutrición en Kitchener, Ontario. “Nos convencemos diciendo, ‘esto no lo puedo comer en casa, pero cuando viajo hay bebidas ilimitadas y bufets y pienso atracarme de todo’.
“La meta es tratar que los hábitos alimenticios de las vacaciones sean parecidos a los normales”. Por ejemplo, comentó, mantenga un horario regular y programado de cuatro a seis horas entre comidas y empaque meriendas saludables “para que no se muera de hambre en algún momento”.
En cualquier caso, D’Ambrosio sabe que la comida es una parte muy preciada de las vacaciones.
“Si va a Italia disfrute la pasta y el vino”, dijo. Pero también aconseja mantener un equilibrio sano y limitar las calorías líquidas, “porque estas son tramposas”. Es más probable que consumamos calorías líquidas como bebidas alcohólicas o azucaradas, más que calorías provenientes de los alimentos”.
En casa o de viaje, los expertos quedan de acuerdo en que la moderación debe ser el tema.
“Las vacaciones sólo son parte del paquete holístico” y completo para tener buena salud, dijo Rohatgi. “Controlar el estrés y la alimentación, además de hacer ejercicio, siempre será lo primordial”.