En su cartera, mi abuela María llevaba siempre una diminuta pastilla blanca, que, según ella, era “cura milagrosa” para cualquier mal, desde una jaqueca hasta una punzada en el corazón. En cuanto alguien exclamaba “¡ay, qué dolor de cabeza tengo!”, mi abuela le ofrecía una aspirina.
Una vez, mi abuela sufrió una fractura de rodilla al caerse en la calle. Después de una cirugía en el hospital, le di dos aspirinas para mitigar su dolor. Como arte de magia, el dolor desapareció. Sin embargo, al día siguiente se sintió muy mal y el cirujano descubrió una úlcera en su estómago. ¿La causa? La aspirina, la cual, según el médico, había sido tomada en exceso por muchos años.
⭕️ Propiedades analgésicas y antiinflamatorias. La aspirina aminora los dolores de cabeza y musculares, y artritis.
⭕️ Acción anticoagulante. La aspirina previene la formación de coágulos sanguíneos.
⭕️ Prevención de afecciones cardiovasculares. Gracias a su efecto anticoagulante, la aspirina disminuye los ataques cardiacos graves o accidentes cerebrovasculares. Como prevención, las dosis bajas de aspirina de 81 mg, son más efectivas. Los médicos prescriben una dosis diaria que varía entre 75 mg y 325 mg.
❌ Irritación del tracto gastrointestinal. La aspirina puede irritar y dañar el recubrimiento del estómago. Las personas con antecedentes de trastornos estomacales, como úlceras, gastritis o enfermedades inflamatorias intestinales, están en mayor riesgo.
❌ Hemorragias. Como anticoagulante, la aspirina fomenta la probabilidad de sufrir hemorragias, sobre todo en dosis elevadas.
❌ Reacciones alérgicas. Hay individuos que padecen alergia a la aspirina, con falta de aire o erupciones cutáneas. En ciertas ocasiones, se confunde con el asma debido a que los síntomas son similares.
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❌ Interacciones con otros medicamentos. La aspirina interactúa con ciertos medicamentos, como anticoagulantes, antiinflamatorios no esteroides y para la presión arterial, lo cual acentúa el riesgo de efectos secundarios.
❎ Mito. Es necesario tomar aspirinas al primer signo de un derrame cerebral. Falso. Hace que el riesgo de sangrado sea mayor.
❎ Mito. La aspirina calma el dolor de muelas si se coloca directamente sobre el diente. Falso. La aspirina no actúa localmente, lo que significa que no se absorbe al aplicarse en el diente. Además, daña el esmalte dental o las encías.
❎ Mito. El ibuprofeno y el paracetamol han desplazado a la aspirina. Falso. La aspirina es muy popular para terminar con dolores de cabeza, musculares, de espalda y de muelas.
✅ Mito. La aspirina propicia sangrados graves en el tracto digestivo. Correcto. Una investigación sostiene que las personas que consumen aspirina tienen un riesgo superior de afrontar un sangrado en el tracto digestivo (sobre todo en el estómago) en comparación con aquellas que no la toman.
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🟧 ⁉️SABÍA QUE…
Aunque la aspirina es un medicamento contemporáneo, los antiguos egipcios y griegos utilizaban extractos de corteza de sauce como remedio natural para calmar el dolor. Marca de fábrica: En 1899, la compañía alemana Bayer fue la primera en lanzar la aspirina en forma de tabletas. El nombre “Aspirin” es una combinación de las palabras “A” por acetil, “spir” por Spirsäure (ácido salicílico) e “in” que era un sufijo usual para los medicamentos en esa época.
En la última década del siglo XIX, Félix Hoffmann, empleado de la industria farmacéutica, era muy conocido por su habilidad en la química. La razón por la que se interesó en la búsqueda de nuevos medicamentos fue por el dolor de cabeza crónico de su padre.
Félix conocía bien el ácido salicílico, que se extraía de la corteza del sauce. Pero, era irritante para el estómago y con efectos secundarios desagradables. Al final, encontró una combinación más prometedora: el ácido acetilsalicílico. Probó esta nueva sustancia en su padre, y los dolores de cabeza desaparecieron rápidamente. De esta forma, Félix descubrió la aspirina.
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