“grupo de control” de 22 personas que tuvieron fracturas de extremidades pero no conmociones.
En un plazo de 24 horas tras su lesión, poco más de la mitad de los pacientes con conmociones leves tenían un sentido del olfato reducido, en comparación con un 5 por ciento de los pacientes con fracturas óseas, encontraron los investigadores canadienses.
Un año más tarde, el sentido del olfato de los pacientes con conmoción había vuelto a la normalidad (la mayoría en un plazo de seis meses), pero su tasa de ansiedad (de un 65 por ciento) era mucho más alta que la del grupo de control, mostraron los hallazgos.
Los síntomas de ansiedad incluían preocupación, dificultades para relajarse y sentimientos repentinos de pánico.
El estudio, dirigido por la Universidad de Montreal, se publicó en una