reducir gradualmente la carne roja (la carne de res, el cordero y el cerdo, además de las carnes procesadas) en su dieta.
3. Cambie de frutos secos salados a frutos secos sin sal, y de sopas y verduras enlatadas regulares a las variedades bajas en sodio. Son formas indoloras de reducir la sal innecesaria.
4. Cambie de mantequilla a aceite de oliva, y de aderezos cremosos a vinagretas. Esto aumenta las grasas insaturadas en su dieta al mismo tiempo que reduce las saturadas.
5. Cambie de leche entera a leche al 2 por ciento, y luego leche al 1 por ciento. Aunque algunos estudios han reportado que los lácteos con toda la grasa no son tan malos para la salud como se pensaba, ese cambio reducirá las calorías si necesita ayuda para perder peso o para no recuperar el peso perdido.
6. Cambie de pasta con crema a pasta con