el programa de ejercicio supervisado”, escribieron Ashley Akerman y sus colaboradores, de la Universidad de Otago y el Hospital Público de Dunedin, en Nueva Zelanda.
Tres especialistas en EAP que revisaron los hallazgos dijeron que es demasiado pronto para afirmar que hacer inmersiones en agua caliente permita prescindir de las sesiones más largas de ejercicio.
“Como los participantes del estudio salieron del agua y realizaron de 15 a 30 minutos de calistenia, el estudio no puede afirmar si la terapia con calor es o no un reemplazo del ejercicio”, señaló Bruno Roseguini, profesor asistente de salud y kinesiología en la Universidad de Purdue en West Lafayette, Indiana.
Roseguini también anotó que el estudio no fue una comparación equivalente. El grupo del ejercicio realizó en promedio apenas una sesión de ejercicio por semana, en comparación con el grupo de la terapia con calor, que tuvo un promedio de cuatro veces por semana.
El Dr. Darren Schneider, director del Centro de Cirugía Vascular y Endovascular en NewYork-Presbyterian y Weill Cornell Medicine en la ciudad de Nueva York, apuntó que la