persona quiere que usted sea. Podría comenzar a cambiar su conducta natural para lograr caerle bien.
Los expertos afirman que en realidad es un ejemplo de que usted está manipulando a la otra persona, aunque quizá no sea consciente de que eso es lo que hace. Intentar siempre complacer a los demás puede erosionar su sentido de la integridad, y usted puede comenzar a sentirse mal consigo mismo.
Los expertos afirman que ser uno mismo y arriesgarse a no caerles bien a las personas es mejor que experimentar el estrés y la tensión que resulta de desvivirse por complacer a los demás.
Más información
El Centro de Ciencias por el Bien Común de la Universidad de California, en Berkeley, ofrece más información sobre los peligros de siempre intentar complacer a los demás y cómo reconocer los síntomas.